En principio debemos de comprender el significado de este calificativo, que ha permitido la consecución de varios (anti´s), como el anti-judaísmo en la Edad Antigua, Edad Media y algunos siglos donde se gestó el llamado renacimiento de la cultura occidental, pues con posterioridad esos (anti´s) se aplicaron; no solo se a políticas o luchas religiosas, raciales, culturales o étnicas, sino con mayor entusiasmo, odio, discriminación y peligrosidad irracional a otros conceptos, como por ejemplo: al semitismo, socialismo, comunismo, populismo, sionismo..etc..
La palabra necedad se define a la calidad o adjetivo que describe al individuo necio, que se caracteriza por su ignorancia y por actuar de manera desacertada. Dicha palabra deriva del latín “nescius” que significa Necio y del sufijo “dad”, que indica cualidad; además tiene varios e innumerables sinónimos, como: estupidez, majadería, disparate, memez, cretinismo, sandez, idiotez, imbecilidad, tontería o bobada (entre otros). Sus antónimos serían dos: sensatez y conocimiento.
Se dice que en el fondo estos individuos necios, en realidad tienen otras causales -aparte de las ya mencionadas-, por un gran temor de que se olviden sus personas en un corto tiempo; por ello ejercen y defienden a toda costa sus posturas u opiniones, para convertirlas en verdades que en la mayoría de las ocasiones son inventadas o manipuladas, pero que terminan creyéndolas, no importando los riesgos que ellos mismos y otras personas puedan tener. En una palabra, quieren destacar para que el olvido no los sepulte o los consuma.
Curiosamente individuos, monarcas, instituciones, líderes, gobernantes y hasta países enteros logran sus designios en base a golpes de suerte y algunas estrategias, que atraen primero a unos cuantos y después, a millones que son de su condición o que anteponen su interés a la verdad, la razón, la moral, o los grandes errores cometidos, anteponiendo simplemente su conducta, como una actuación de personas discretas, ante los posibles riesgos que existían.
Pero a todo esto… ¿qué nos dice la Biblia?
“La necedad es el resultado de que una persona está usando mal la inteligencia que Dios le ha dado”; también refieren que sus destrezas de razonamiento las usa para tomar posturas o decisiones equivocadas… y agregan -sobre todo en el nuevo testamento- la palabra insensatez, por conductas repetidas de enojo, desobediencia a sus padres; y concluyen con una sentencia de que, si no cambia esa persona en su forma de actuar, de seguro torcerá su camino.
Ficha 2
Toda esta sintomatología y consecuencias de la necedad, hábilmente las recogen varios proverbios o frases célebres, como estas:
·“Una estupidez no se puede dominar si no es con otra” (José Ortega y Gasset)
·“Cuando se hacen tonterías, éstas por lo menos deben dar resultado. El tonto tiene una gran ventaja sobre el hombre de espíritu: está siempre contento de sí mismo.” (Napoleón Bonaparte)
·“Bien se puede perdonar a un hombre ser necio una hora, cuando hay tontos que no lo dejan de ser una hora en toda su vida.”(Francisco de Quevedo y Villegas)
·“La ciencia es universal; el arte, nacional; la necedad, nacionalista.”(Maurice Ravel)
·“Un necio puede hacer en una hora más preguntas que las que un sabio puede contestar en siete años.”(John Ray)
·“Nadie está libre de decir estupideces. Lo grave es decirlas con énfasis.”(Michel Eyquem, señor de Montaigne)
·“Nunca están los hombres más cerca de la estupidez que cuando se creen sabios.”(lady Mary Wortley Montagu)
·“Transformar necios en genios, o madera de haya en madera de roble, es, sin duda, tan difícil como convertir el plomo en oro.”(Georg Christoph Lichtenberg)
·“El lugar común es el dogma del necio.”(Ricardo León)
·“Hay dos clases de tontos: los que no dudan de nada y los que dudan de todo.”(Charles Joseph, príncipe de Ligne)
·“Un tonto ilustrado es más tonto que un tonto ignorante.”(Moliére)
·“No hay necios más insoportables que aquellos que tienen algún talento. No hay necio más molesto y peligroso que el ingenioso. Se puede ser necio teniendo talento, pero jamás teniendo juicio.”(François de la Rochefoucauld)
Como decíamos en un principio, las características, actuaciones y consecuencias de muchos necios o respetables autoridades con diferentes grados de suerte y audacia, escribieron más de una página negra y sangrienta en los anales de la humanidad, iniciando -desde los primeros siglos de nuestra época- una cadena de varios jerarcas cristianos que sembraron el odio entre su rebaño, mediante mitos y libelos a escala doctrinal, y que aún con el pontificado y declaraciones de Juan XXIII, continúan causando estragos; un caldo de cultivo que incluso contagió a otras derivaciones o ramas de la Iglesia, con diatribas contra los judíos pronunciadas por Martín Lutero.
Podemos continuar con los fenómenos políticos y sociales de hechuras mayormente del pasado siglo XX, como los movimientos antisocialistas, anticomunistas y el anti-populismo. En estas reacciones en contra, generalmente se pasan por el mismo racero todas las variantes de cada uno, como el Socialismo Democrático, el Comunismo Soviético, el Gulash (practicado en Hungría), el autoritario o Mrxista y el de las Instituciones, alguna de ellas católicas; por último, entre una gran variedad, tenemos al Antipopulismo, con tendencias políticas y económicas izquierdistas o derechistas, con diferentes grados de aplicación en diversas naciones, incluyendo las eminentemente capitalistas como en los E.U.
Como podemos observar el prefijo “Anti” implica oposición… ¿A qué? ...pues si lo deseamos, prácticamente a todo. La diferencia estriba en el grado de necedad (factores negativos) de sus líderes, que no podemos confundir con la perseverancia que constituye los intentos por conseguir determinada meta, en base a ciertos conocimientos o anhelos (positivos) que mantienen viva la esperanza.